El San Pier Damiano Hospital [SPDH] de Faenza, parte del grupo GVM, representa un punto de excelencia en el panorama italiano, siempre listo para garantizar el máximo confort a quienes día a día se encomiendan a la estructura.
“Tanto para las personas que ingresan aquí por primera vez como para quienes ya conocen nuestra estructura, tenemos el deber de garantizar una estadía confortable y serena. Esta serenidad solo es posible si existe un adecuado plan de seguridad, capaz de prevenir hurtos y establecer detallados planes de fuga en caso de peligro”.
Con estas palabras, Maria Cecilia Sansavini, Administrador Delegado del San Pier Damiano Hospital, subraya un aspecto fundamental. “La seguridad es todo: es un conjunto de elementos percibidos y no percibidos que permite al personal sanitario y administrativo, así como a los pacientes, vivir y sentirse en un ambiente protegido”.
LAS NECESIDADES
Una seguridad completa, perceptible y siempre presente: el paciente debe sentirse como en su casa, protegido y sereno. Este es el objetivo preciso surgido de la meticulosa encuesta realizada por CISA: un valioso análisis que ha permitido identificar prioridades y soluciones, además de iniciar una provechosa colaboración con el San Pier Damiano Hospital.
RESPUESTA A PETICIÓN
Ciertas necesidades específicas requieren respuestas a medida: CISA ha creado un paquete ad hoc de soluciones que combina dispositivos mecánicos con las más sofisticadas soluciones electrónicas: un equilibrio entre Security (prevención de entradas ilícitas a través de cualquier acceso) y Safety (sistemas diseñados para el tránsito de las personas en caso de peligro, como las barras antipánico con obligación de certificación CE).
Solución CISA para San Pier Damiano Hospital
INTEGRACIÓN VENCEDORA
La solución adoptada por el SPDH incluye una combinación de dispositivos mecánicos e soluciones electrónicas, coordinados por un sistema de control informatizado. El sistema se basa en una tarjeta electrónica: el operador utiliza la tarjeta de identificación personal (con nombre, apellido y fotografía) para registrar la entrada, mientras que, al lado, el convalidador de pared habilita el funcionamiento de la tarjeta, enviando al sistema de control el historial de los accesos y, sobre todo, verificando el paso a través de los accesos.
VENTAJAS A DISTANCIA
La solución hallada permite al gestor del sistema intervenir a distancia para modificar las credenciales de acceso. Es posible inhibir, incluso en forma temporal, la entrada a determinados usuarios o autorizar a otros, sin que el gestor entre en contacto directo con la tarjeta. Además, en caso de extravío de la tarjeta, el personal debe simplemente comunicarlo para que la misma sea desactivada.