Si se trata de una puerta cortafuegos, el cierrapuerta debe mantener cerrada la puerta en caso de incendio. Por este motivo, la fuerza de oposición de un cierrapuerta puede comprometer la facilidad de apertura y constituir un obstáculo, especialmente para ancianos, niños y personas con discapacidades físicas. La tecnología de levas de los cierrapuerta aéreos CISA de última generación permite una excepcional eficiencia de apertura. En efecto, la fuerza inicial de apertura decrece en forma repentina, facilitando la apertura para todos.